Si eres un amante de las flores y tienes dalias en tu jardín, es importante saber cómo almacenar los tubérculos de dalia durante el invierno para asegurar su supervivencia y tener hermosas flores en la próxima temporada. En este artículo, te proporcionaremos consejos detallados sobre cómo manejar y almacenar tus tubérculos de dalia para el invierno.
Espera hasta el momento adecuado para cosechar
El primer paso para almacenar los tubérculos de dalia es esperar hasta el momento adecuado para cosecharlos. Es importante que los tubérculos estén completamente maduros antes de ser almacenados. La mejor época para cavar los tubérculos es después de que el follaje haya muerto por completo para el invierno. En climas más fríos, esto puede ocurrir a principios de octubre, mientras que en climas más cálidos puede ser hasta diciembre.
Preparación para la cosecha
Antes de cosechar los tubérculos de dalia, hay algunas cosas que puedes hacer para prepararlos. Recorta los tallos muertos a unos pocos centímetros por encima del suelo. Esto ayudará a que los brotes salgan y facilitará la división de los tubérculos. Si hay posibilidad de lluvia entre el momento en que cortas los tallos y el día en que planeas cosechar los tubérculos, cubre las partes superiores de los tallos cortados con papel de aluminio o plástico para protegerlos del agua.
Excava con cuidado
Los tubérculos de dalia son delicados, por lo que es importante excavarlos con cuidado para evitar dañarlos. Usa una horquilla de jardín o una pequeña pala para aflojar el suelo alrededor del tallo en un radio de aproximadamente un pie. Si encuentras un tubérculo, amplía tu círculo para no romper el grupo. Luego, usa la horquilla o la pala para levantar suavemente los tubérculos. El grupo debería separarse fácilmente siempre que el suelo no esté demasiado compactado.
Limpia los tubérculos
Es importante limpiar los tubérculos antes de almacenarlos para evitar la propagación de microorganismos, hongos y bacterias. Cepilla suavemente la mayor cantidad de tierra posible, prestando atención a los espacios entre los tubérculos. Luego, enjuágalos con agua suave para asegurarte de que estén limpios. Examina los tubérculos en busca de tejido de raíz dañado o podrido y córtalo para proteger el resto de los tubérculos.
Separa los grupos
En este punto, debes decidir si quieres dejar los tubérculos intactos o separarlos. Si los separas, asegúrate de que cada sección tenga al menos un brote para garantizar el crecimiento. Identifica el tubérculo madre, que es el que produjo las dalias de la temporada pasada. Este tubérculo será de color marrón oscuro. Retíralo de los nuevos tubérculos y deséchalo. Si queda suciedad en los tubérculos recién divididos, enjuágalos nuevamente. Siempre usa una herramienta limpia al separar los tubérculos para evitar la introducción de patógenos.
Preparación para el almacenamiento
Antes de almacenar los tubérculos, es importante que se sequen para evitar el crecimiento de moho o hongos durante el invierno. Si tienes una rejilla, puedes colocar los tubérculos sobre ella para que tengan una mejor circulación de aire y se sequen más rápido. Asegúrate de que estén completamente secos antes de almacenarlos. Esto puede llevar desde unos pocos días hasta unas pocas semanas. Colócalos en un lugar que no experimente temperaturas de congelación, en un área oscura y con luz indirecta del sol, y déjalos secar hasta que la piel comience a arrugarse.
Elige el método de almacenamiento adecuado
Existen diferentes métodos de almacenamiento que funcionan bien para las dalias. Algunas opciones incluyen cajas poco profundas con vermiculita, envoltura de plástico para evitar que se sequen demasiado, bolsas de papel, cajas de leche o cajas llenas de vermiculita. Algunos jardineros también envuelven los tubérculos en periódicos, aunque estos no son tan comunes como solían ser. La elección del método de almacenamiento depende de tus preferencias personales.
Almacénalos en el lugar adecuado
Guarda tus tubérculos en sus contenedores en un lugar fresco, seco y oscuro. Quieres que los tubérculos entren en un estado de dormancia durante el invierno. La temperatura ideal para almacenar los tubérculos de dalia está entre 4 y 7 grados Celsius. Evita almacenarlos en un espacio que pueda congelarse y protégelos de la humedad excesiva, ya que esto puede pudrirlos. Un garaje puede ser un buen lugar de almacenamiento, siempre y cuando esté protegido de temperaturas extremas.
Revisa de vez en cuando
Una vez que tus tubérculos de dalia estén almacenados correctamente, puedes relajarte hasta la primavera. Sin embargo, es recomendable revisarlos de vez en cuando para asegurarte de que todo esté en orden. Verifica si hay crecimiento de moho o hongos y retíralos rápidamente si los encuentras. También verifica la humedad, ya que no quieres que los tubérculos se sequen demasiado. Si es necesario, puedes rociar un poco de agua sobre el material de embalaje para rehidratarlos.
En resumen, almacenar los tubérculos de dalia para el invierno es un proceso sencillo que garantizará que tus flores sobrevivan y florezcan en la próxima temporada. Sigue estos consejos detallados para asegurarte de que tus tubérculos estén en las mejores condiciones durante el almacenamiento. ¡Esperamos que tengas una exitosa temporada de dalias!